En
este curioso y arriesgado país que es España han podido suceder algunas cosas,
que parecen increíbles cuando se las revisa con sentido histórico, como una
guerra civil que para algunos nunca se ha terminado. Pero a su escala adecuada
aun suceden hechos increíbles que son poco comprensibles, como es por ejemplo
que un pueblo, (o sus gestores) de 1400 habitantes se crea al margen de la
modernidad y del desarrollo del mundo y piense que su imagen idílica,
arqueológica, o climática, puede quedar congelada en el tiempo, intentando que
el crecimiento empresarial, industrial o de los negocios sea imposible o
desmotivado. De ese pueblo en franca recesión de habitantes desde hace más de
10 años solo podremos esperar que cada día tenga habitantes más mayores,
negocios más pequeños y menos alicientes para vivir en él. Los primeros que se irán
son los jóvenes buscando oportunidades y si eso deja en manos de los más
obsoletos la administración de sus tiempos, seguro que no se producirá más que
perdidas de habitantes e incapacidad para vivir equilibradamente los tiempos
futuros.
Esa es
la imagen que produce Puebla de Sanabria que podría por muchas razones de
situación, historia y fecundidad vegetal, ser un hito en el valle del Tera y
que desde hace 30 años ha venido renunciando a crecer, siendo cada año que pasa
menos habitantes y menos servicios.
Y si
ya eso es constatable por las estadísticas actuales con las condiciones que
hemos vivido en esos últimos 30 años, ahora parece que las Nuevas Normas urbanísticas
que pretende aprobar su actual ayuntamiento producirán unas razones aún más
poderosas para que el pueblo sea cada día menos atractivo, para los negocios y
con menos habitantes. En un país como España de más de 2.000 años de historia,
hay miles de sitios y oportunidades arqueológicas que conservar, pero con eso
también se compite porque los más de 80.000 municipios de este país casi todos
tienen algo y que si no induce a que vengan nuevos capitales o ideas pues se
van a otro sitio que les den más facilidades.
Confieso
que hay que hacer un importante esfuerzo intelectual, para leer todos los 6
apartados de este documento cuyos nombres registro aquí con las páginas de cada
uno:
Memoria Informativa 82paginas
Estudio ambiental estratégico 183 paginas
Memoria vinculante
63 paginas
Normativa Urbanística 261+55+37 paginas
Catálogo de elementos protegidos 346 paginas
Catalogo y normativa arqueológica 80+81 paginas
Total
1188 paginas
Planos
37 planos
Es
evidente que la lectura y entendimiento de este documento requiere un trabajo
de muchas horas y de varias competencias para asimilarlo, comprenderlo e
incluso manejarlo.
Tendremos
que convenir que el trabajo es muy exhaustivo, pero tal vez también se pueda
aceptar que no es equilibrado con lo que conviene a un pueblo de 1400
habitantes y de los cuales ya más del 50 % son personas jubiladas. Podemos pensar
también que roza lo absurdo, porque es evidente que en este país que casi cada
piedra ya tiene una historia de tanto mirar al pasado podemos perder el futuro.
Al
intentar ser practico lo más importante es la Memoria urbanística y la Memoria Vinculante,
pero entre los dos suman 416 páginas amen de la necesidad de consulta de
planos.
Solo
nos queda pensar para ver el desequilibrio de estas actuaciones que si esta
misma metodología se aplicara a Madrid en su relación de habitantes con Puebla
de Sanabria el documento podría tener en función de los habitantes actuales ósea
3.305.408/1400 =2.361 que saldrían un documento de 2.788.347 páginas.
Por cierto,
las Normas Urbanísticas de Madrid correspondiente a su Plan General de Ordenación
Urbana de 1977 actualmente vigentes
solo tienen 410 páginas.
14 de
junio de 2022